Parque nacional Volcán Barú
El Parque Nacional Volcán Barú, situado en la provincia de Chiriquí, se erige como una joya geológica y ecológica en Panamá.
Con una extensión de 14,325 hectáreas, este parque no solo representa el punto más alto del país, sino que también es un refugio de biodiversidad y un testimonio de la rica historia geológica de Panamá.
El Parque Nacional Volcán Barú fue creado en el año 1976 y está ubicado en la provincia de Chiriquí.
Es frecuente encontrar a los aficionados de la observación de aves principalmente en el parque, debido a que ofrece la oportunidad de ver a una de las aves más elusivas de Centroamérica, el quetzal.
Las temperaturas medias anuales fluctúan entre los 20ºC en sus partes más bajas hasta menos de 10ºC en la cumbre del volcán.
¿Cómo lograr visitar el Parque Nacional Volcán Barú desde la Ciudad de Panamá?, vía aérea en una hora o por carretera en seis horas hasta la Ciudad de David, desde aquí por carretera hasta el centro poblado de Boquete a 40 kilómetros en 25 minutos, para visitar la cima del Volcán Barú y los diversos senderos de acceso al Parque.
A pesar de sus reducidas dimensiones en el área protegida se localizan bosques muy húmedos montanos, bosques húmedos montanos bajos que no se encuentran en ningún otro lugar de Panamá, bosques pluviales montanos bajos, bosques pluviales montanos, bosques muy húmedos montanos bajos y bosques pluviales premontanos.
Los principales servicios que ofrece el Parque nacional Volcán Barú, es que cuenta con una diversidad de alojamientos, guías de restaurantes, sistema telefónico, bancos, información turística y servicio de transporte.
Historia y Geología del Volcán Barú
El Volcán Barú, con sus 3,474 metros sobre el nivel del mar, es un testigo silente de la historia geológica de la región. Aunque su última erupción tuvo lugar hace millones de años, el paisaje que ha moldeado y las huellas de su actividad pasada son evidentes en la diversidad de formaciones rocosas y terrenos que lo rodean.
Flora y Fauna del Volcán Barú
El parque es un santuario de biodiversidad. Desde aves como el quetzal y el tucán, hasta mamíferos como el puma y el león venado, el Parque Nacional Volcán Barú protege a numerosas especies endémicas. Los senderos del parque serpentean a través de bosques húmedos tropicales, hogar de robles centenarios, helechos, orquídeas y una variedad de flora que pinta el paisaje con colores vibrantes.
Aventura y Turismo en el Parque Nacional Volcán Barú
El ascenso al Volcán Barú es una experiencia que todo aventurero debe vivir. Con dos rutas principales, una desde Boquete y otra desde Volcán, el camino hacia la cima es un desafío recompensado con vistas panorámicas inigualables.
En días claros, es posible apreciar ambos océanos, el Atlántico y el Pacífico, desde su cumbre. Además, para los amantes del rafting, el río Chiriquí Viejo ofrece emocionantes descensos, mientras que senderos como "La Nevera" y "El Quetzal" invitan a explorar la exuberancia del bosque tropical.
TIP: No hay paradas para agua o comida en este sendero, así que debe asistir con tu mochila preparada con agua y comida si deseas hacer un picnic.
NOTA: Hay otro sendero muy popular en este parque llamado El Sendero de Los Quetzales.
Cultura y Gastronomía
Más allá de su belleza natural, la región alrededor del Volcán Barú es rica en cultura y tradiciones. La ciudad de Boquete, puerta de entrada al parque, es famosa por su café aromático, considerado uno de los mejores del mundo.
Los visitantes de esta zona pueden disfrutar de comidas típicas de las tierras altas, enriqueciendo su experiencia con sabores autóctonos.
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El Parque Nacional Volcán Barú es un destino que combina aventura, naturaleza y cultura. Representa no solo la majestuosidad geológica de Panamá, sino también la rica tapeza de biodiversidad y tradiciones que hacen de este país un lugar único en el mundo.
Por último te dejamos un video completo de una crónica de subida a pie hacia la cima del Volcán Barú. Que lo disfrutes!
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